Elon Musk Neuralink recibió aprobación para comenzar un ensayo de seis años para estudiar los efectos de la interfaz cerebro-computadora (BCI). Se utilizará un robot quirúrgico especializado para implantar los dispositivos en los cerebros de los participantes. La misión de la empresa: «Crear una interfaz cerebral generalizada para restaurar la autonomía de quienes tienen necesidades médicas no cubiertas hoy y desbloquear el potencial humano mañana». Los participantes en el primer ensayo deben tener una discapacidad como ceguera, cuadriplejia, paraplejia, sordera o amputación importante de un miembro. Permitir que las personas con discapacidades vivan una vida normal parece noble, pero Musk ha declarado que sueña con ampliar la disponibilidad de Neuralink para todos.
Los ensayos no humanos fracasaron estrepitosamente, lo que resultó en 1.500 animales muertos desde 2018. Algunos empleados anteriores han criticado a Musk por apresurar su investigación, pero no se cometieron actos ilegales, ya que es común, si no esperado, que mueran al menos algunos sujetos de experimentación con animales. Según quienes conocen los estudios, se podrían haber evitado numerosos errores si no fuera por el error humano.
“El estudio PRIME (abreviatura de Precise Robotically Implanted Brain-Computer Interface), un innovador ensayo de dispositivo médico en investigación para nuestra interfaz cerebro-computadora (BCI) inalámbrica y totalmente implantable, tiene como objetivo evaluar la seguridad de nuestro implante (N1) y cirugía. robot (R1) y evaluar la funcionalidad inicial de nuestro BCI para permitir a las personas con parálisis controlar dispositivos externos con sus pensamientos”, afirma Neuralink en su sitio web. Sería una hazaña increíble si este dispositivo le diera a alguien la capacidad de caminar o ver por primera vez. Haría que todas las pruebas valieran la pena. El propio Musk afirmó que el chip funcionará. «Por muy milagroso que parezca, estamos seguros de que es posible restaurar la funcionalidad completa del cuerpo en alguien que tiene una médula espinal cortada».
Sin embargo, Musk tiene objetivos más elevados y dijo que Neuralink será para todos. Musk declaró que él personalmente planea instalar un chip cerebral una vez que esté disponible. Neralink no está en deuda con los accionistas, ya que Musk es propietario absoluto de la empresa. La empresa afirma que no venderá datos a terceros. Sin embargo, los terceros afiliados, los consejos reguladores y los socios de investigación de Neuralink tendrán acceso. El tiempo dirá cómo transcurrirá esta prueba de seis años, ya que espero que escuchemos mucho más sobre la nueva tecnología una vez que comience la prueba.